Lindas naditas perfumadas de Azahar

Lindas nadas perfumadas de azahar que se engalanan los  sueños con peinetas de coral,
y se desmelenan a la noche cuando los gritos asustan más.

Lindas nadas vanidosas que vuelan y vienen y van, huecas hasta los tuétanos que nadie supo habitar

Lindas nadas envidiosas que se esconden a mirar, que les puede la vergüenza porque todos las miran mal y no las comprende nadie, y las quieren explicar sin entenderlas primero, que cansadas están ya de oir tanto parloteo, que dicen y que dirán.

Lindas nadas avariciosas de sus nadas en sus sitios, de sus huecos de cristal que no encuentran forma humana que los pueda habitar.

Lindas nadas orgullosas que regalan  collares de nadas a cambio de tu piedad.

Lindas nadas iracundas que saben todas las nadas con que nada organizar.

Lindas nadas perezosas que a la nada quieren salvar, que nada en si mismas ven que nada pueda significar.

Lindas nadas lujuriosas que de la nada se vengan con arrumacos y puñal.

Lindas nadas glotonas que juegan con la ensalada de nadas, mordisqueando naditas y ninguna hasta el final.

Lindas nadas temerosas, arrojadas al final de esta nada palabrera, que no sabe a donde va.

Nada ocurre siempre, 
 por eso
Nada es tan importante