Conversaciones con mi vieja 1

  Después de varios meses de huida, se detuvo, miró a su alrededor y vio el desierto, miró en su interior y sintió el rico vergel pujando por salir a través de los poros de su piel, las verdes hojas acariciándola por dentro, el agua manando en su interior y el placer cosquilleándole en el pecho y riéndose en su vientre...

Rico vergel, la llamó aquella vieja india sonriente que la abordó en la glorieta de Embajadores y le contó que la buscaba hace tiempo.

-¿a mi? Perdone creo que se equivoca.

-No, te llevo siguiendo mucho tiempo, pero eres muy rápida.

-Disculpe, es que tengo mucha prisa.

-En dos frases me has pedido dos veces perdón. Dos veces me has pedido que no te devuelva el daño que crees que me has hecho.

• Es una manera de hablar.
• La manera de los que temen venganza o castigo por existir, por relacionarse, por pedir, por interrumpir, por toser, por gritar, por asustar, por sorprender, por tocar...
• sí, es cierto. Pero el otro merece un respeto, una consideración.
• Sí, es cierto y tú también eres una otra. Perdona, ¿te importa que nos sentemos un rato? Dijo la vieja sonriente y se colgó de su brazo como si la conociera de toda la vida.

• Sé que no tienes prisa, y que sabes que no me equivoco, y lo sé porque tú solo pides perdón cuando mientes.

Rico vergel se echó a reir y se quedó mirando a la vieja.

• Me siento desnuda...
• como tú has dejado a tantos
• me siento cómoda así, se a que atenerme y los demás también saben lo que puedan esperar de mi
• pues hoy llevas 4 camisetas...

La vieja se quedó mirando a rico vergel y rompió a reir.

Siguieron caminando en silencio por la Ronda de Atocha en dirección al retiro. La vieja pesaba muy poquito, era como un fragil pajarillo colgada de su brazo, le inspiraba mucha ternura, salvo cuando le daba pellizcos en el culo para que caminara más deprisa. Menudas tenazas como dedos tenía la vieja, se notaba que no soltaba facilmente.

-Perdone señora, le dijo, cuando le dio el primero

• te perdono, te perdono, te perdono por pellizcarte el culo.
• Quiero decir, que no tenemos la confianza suficiente...
• Coño que no, si te llevo siguiendo media vida, conozco mejor tu culo que tu cara, que por cierto, que pena... que daba gloria verlo y ahora no se sabe si estás de espaldas o de frente.
• Oiga váyase Usted a la mierda, que me voy y punto pelota.
• Anda, anda, anda, si son cosas de vieja, no me lo tengas en cuenta y punto pelota.¿Este es árbol?

Dijo la vieja señalando un gran árbol de doble tronco rodeado de otros más pequeños, cerca la puerta del ángel caído.

Rico vergel se quedó un instante asombrada pero no le preguntó a la vieja cómo sabía la importancia que ese árbol tenía en su vida. De alguna forma entendía que eso sería huir del encuentro. Respiró, la miró y le dijo

-Sí.

La vieja sonrío. Y se sentó con su espalda apoyada en el tronco. Su cara era del mismo color que la corteza del tronco.

• Es comprensivo pero está un poco dolido. No vienes a verlo, no le cuentas nada.
• Lo sé.
• Sabe que lo sabes y quiere una de tus camisetas

• la de payasa.
• ¿Seguro que quieres quitarte esa, tan pronto?
• Sí, hoy he ido al Teatro Circo Price a ver a David Labride, con mi hija y dos mujeres y dos niñas más
• baja de las ramas, gritó la vieja mirando hacia arriba.

Ella se aferró al tronco y gritó mirando hacia abajo, ¿luego me devolveis la camiseta no?

-Habla en singular, y sí te la devolveré. Baja.

Obedeció, se rascó la cabeza, sintió el vértigo en su interior y se quitó una corta camiseta, rebeca más bien negra calada.

• Me ha gustado mucho el espectáculo, en especial un número, me ha emocionado,
  David, tras hacer un casting es seleccionado por el director de orquesta que se lo ha hecho y se pone muy contento. El director sale y entra con un cubo y una fregona que entraga a David y le dice “lo quiero todo limpio”.
  David comienza a barrer y poco a poco desciende la luz, un foco de luz del tamaño de una paellera de 12 raciones (por poner un tamaño)resalta en el suelo. David intenta barrerlo y el foco esquiva la escoba, lo persigue, se enfada con él, está a punto de golpearlo y se sienta en un lado del escenario enfadado y abandonando la persecución.
  Entonces el foco se acerca a él lentamente y se queda a su lado, David lo empuja con una mano y mira hacia el otro lado ofendido. El foco de luz vuelve y David lo vuelve a rechazar.
  Vuelve una tercera vez y David lo mira de reojo y lo acaricia un poquito. El foco se hace un poquito más grande, David lo acaricia cada vez más juguetón, le hace cosquillas y el foco se hace cada vez más grande, David se tumba en él y se duerme, se oye el grito del director desde fuera de escena y David se levanta de un salto y el foco vuelve a su tamaño original. Davidb arre el foco dentro del cubo de la limpieza, oscuro y David eleva el cubo con su interior iluminado.

Para mi, este número es una obra maestra dramática y tierna, real como la vida misma. ¿puedo dejarlo aquí?

• Solo un poquito más, dijo la vieja suavemente.
  - Bueno, creo que todo actor o payaso, quiere tener el foco siempre alumbrándole, resaltándole, quiere que el foco de luz, le convierta en el foco de atención. BUENO, YO ERA ASÍ. SI tras un casting, me encuentro con que el foco huye de mi... es una preciosa metáfora de lo que acaba de suceder que me hace llorar, que cuando el foco viene a mi lo rechace ofendida es algo que también puedo reconocer, la reconciliación con el foco desde el juego y la ternura creo que es el terreno en el que me encuentro ahora... aunque me da miedo. Hoy hasta aquí-
• Gracias.... Y TOMA TU CAMISETA.... PAYASA.

LA VIEJA SE ADENTRÓ EN EL RETIRO Y RICO VERGEL huyó hacia su casa, se paró miró a su alrededor camino de su casa, y en el desierto... una pequeña flor despuntaba en el horizonte

http://youtu.be/gLXVObjk-fg